Cuando se realiza la transferencia de archivos a memorias USB, es posible experimentar una sensación de seguridad y tranquilidad, creyendo que los datos estarán protegidos de manera indefinida.
Lo cierto es es dicha percepción debe ser moderada, ya que es considerable que se piense que los documentos allí guardados durarán mucho tiempo. Sin embargo, es clave que las memorias USB, al igual que la mayoría de los productos tecnológicos, poseen una durabilidad limitada.
Por tanto, desde Recuperación de Datos les recomendamos tomar precauciones y evaluar regularmente las unidades de almacenamiento más antiguas. Recuperación de Datos.
Las memorias USB presentan una vida útil y una potencial fecha de caducidad, aunque no sea un término exacto, establece un periodo de tiempo mínimo. Después de transcurrido este tiempo, el dispositivo puede sufrir daños internos, lo que conlleva muchas veces a la pérdida o corrupción de los archivos almacenados en su interior.
Por consiguiente, es fundamental evitar depositar una confianza excesiva en su durabilidad y mantener una actitud vigilante en relación al funcionamiento de su dispositivo.
La realidad de las memorias usb: ¿Son realmente seguras?
Las icónicas memorias USB, conocidas como pendrives o sticks USB, son un dispositivo de almacenamiento común que seguramente tienes en casa.
Estos dispositivos utilizan la tecnología de memoria flash NAND, la cual promete salvaguardar tus datos en todo momento, ya que solamente copias los archivos y luego desconectas la memoria USB del ordenador donde realizaste la transferencia. ¡Listo! Tus datos están guardados.
Sin embargo, muchas veces la duración de los datos almacenados en una memoria USB tiene un límite mínimo garantizado de 10 años, que si se analiza bien parece un periodo considerable, pero en realidad no es tanto tiempo.
Por lo tanto, a partir de esa década, cualquier cosa puede suceder. No implica que tus datos desaparezcan de inmediato, ya que no sería lógico. Sin embargo, es el momento en el que empiezas a exponerte a posibles problemas.
La duración adicional dependerá de una amplia variedad de factores, los cuales detallaremos en el próximo párrafo. Recuperación de Datos.
Factores clave que afectan la durabilidad.
En Recuperación de Datos sabemos bien que una vez que se alcanza el estándar de durabilidad de 10 años, entran en juego numerosos factores que dificultan la predicción de un período adicional de vida útil para tus memorias USB.
Los fabricantes de bajo costo o marcas de origen desconocido no brindan memorias USB reconocidas por su capacidad para retener datos durante períodos más prolongados.
Por otro lado, las marcas que utilizan componentes de mayor calidad y refuerzan sus memorias con protecciones adicionales garantizan una durabilidad superior.
El estándar JEDEC JESD47 establece la previsión de los 10 años de resistencia. Acá la memoria debe tener una durabilidad de 10 horas a una temperatura de 125 °C, lo que se simplifica en una vida útil de 10 años a 55 °C.
Por lo tanto, la temperatura a la que se expone la memoria es otro aspecto importante, debido a que si son muy altas resultan perjudiciales para estos dispositivos.
Ahora, si expones tus memorias USB directamente al sol o las llevas en entornos demasiado calurosos durante tus viajes, estarás aumentando el riesgo de pérdida prematura de datos.
Asimismo, además del calor debes tener cuidado con la humedad y otros factores relacionados con el almacenamiento adecuado de la memoria. Recuerda tratarla con precaución.
Por último, la durabilidad también puede disminuir en función del nivel de estrés al que se someta la memoria USB. Recuperación de Datos.
¿Con qué frecuencia almacenas, borras y vuelves a copiar datos? Los ciclos de escritura son un problema real en las memorias, ya que a medida que se copia, borra y copias nuevamente, la vida útil del dispositivo se reduce gradualmente.
Por ende, es posible que pierdas tus datos debido a este nivel de uso.
Mantén tus datos a salvo: 8 consejos prácticos de seguridad para memorias USB.
La durabilidad de los datos almacenados en una memoria USB puede superar los 10 años de vida útil del dispositivo si se toman en cuenta ciertos factores y se siguen algunas recomendaciones.
Es importante recordar utilizar la opción «Quitar hardware de forma segura» al finalizar la sesión de almacenamiento, a pesar de que pueda parecer incómodo. Esta práctica preserva la integridad de la memoria y evita posibles daños.
Por lo pronto, deberás evitar editar archivos directamente en la memoria USB y realizar cambios desde el disco duro antes de transferirlos al dispositivo para contribuir a la supervivencia de los datos.
Asimismo, es recomendable desconectar la memoria USB del ordenador cuando no se esté utilizando, ya que el sistema operativo continuará realizando comprobaciones innecesarias, sometiendo al dispositivo a un estrés innecesario.
Además, se aconseja verificar periódicamente que los datos estén a salvo y considerar la posibilidad de moverlos a memorias USB más nuevas. Recuperación de Datos.
Por otro lado, realizar copias de seguridad también es fundamental, especialmente de los datos importantes que no se pueden permitir perder. El almacenamiento prolongado puede provocar la pérdida de archivos cuando se intentan recuperar años después.
No obstante, es clave cuidar el lugar de almacenamiento de los pendrives, optando por un lugar fresco y protegiéndolos en una caja hermética. El polvo y el agua son enemigos de las memorias USB.
En definitiva, se debe evitar tocar directamente los contactos del pendrive con los dedos, ya que el contacto con el sudor y el aceite de la piel puede afectar su funcionamiento.
Siguiendo estas recomendaciones, se mejora la vida útil de las memorias USB, pero es importante tener en cuenta que no son dispositivos eternos. Para asegurar la protección de los datos almacenados, se deben tomar otras precauciones adicionales.
(S.M.C).