En la era actual, los datos se han convertido en el activo más valioso, siendo esencial en prácticamente todas las áreas de nuestra vida, desde el trabajo hasta la escuela y trámites personales.
De hecho, actualmente vivimos en un mundo digital en constante evolución, donde nuestra información circula de un lado a otro de manera incesante y, lamentablemente, son vulnerables a una serie de riesgos. Recuperación de Datos.
Por ende, en este artículo analizaremos los desafíos que enfrentamos y cómo aplicar la Regla 3-2-1-1-0 que puede marcar la diferencia en la protección de los datos.
La vulnerabilidad de nuestros datos.
Nuestros datos, en sus diversas formas y formatos, enfrentan una amplia gama de amenazas en la era digital, la cuales van desde la pérdida y el robo de datos, fallas tecnológicas y errores humanos hasta desastres naturales y ataques cibernéticos cada vez más sofisticados, como es el caso del ransomware.
Ahora bien, en base al «Reporte de Tendencias de Protección de Datos 2023» de Veeam, el ransomware se ha convertido en la causa más común de la falta de disponibilidad de datos. Es más, en América Latina, el 52% de las empresas experimentaron entre dos y tres ataques de ransomware en el último año, y un 18% sufrió cuatro o más.
Por lo tanto, esto nos marca la importancia de tomar medidas proactivas para proteger nuestra información en un mundo en constante cambio. La prevención es la estrategia más efectiva, y una de las herramientas más valiosas para lograrlo es la Regla 3-2-1-1-0.
La regla 3-2-1-1-0 en detalle.
- «3»: Mantener tres copias de los datos.
Es clave mantener, al menos, tres copias de los datos. Esto implica tener la fuente original de los datos y al menos dos copias de seguridad. Recuperación de Datos.
La razón detrás de esto es simple: cuantas más copias tengas, menor será el riesgo de perder tus datos. De hecho, si ocurriera un desastre que afecte los datos originales y la copia principal, la copia de seguridad secundaria permanecerá intacta.
- «2»: Dos formas diferentes de medios para almacenar los respaldos.
Desde “Recuperación de Datos” aconsejamos almacenar la información en dos formatos diferentes, como por ejemplo, una unidad de disco duro interno para una de las copias y un medio de almacenamiento extraíble, como almacenamiento en la nube, cintas o unidades de disco duro externas, para la segunda copia.
- «1»: Almacenar una copia de respaldo fuera del sitio.
Se recomienda mantener al menos una copia de seguridad fuera de tu ubicación física principal. Esto es esencial para evitar la pérdida de información en caso de desastres como incendios, inundaciones o robos.
La copia de seguridad secundaria puede estar en una nube privada a través de un proveedor de servicios o en una nube pública. Recuperación de Datos.
- «1»: Almacenar una copia fuera de línea.
Esto significa que la copia debe estar desconectada de la red y fuera del alcance de cualquier infraestructura de TI. Esto se logra a través de medios como discos USB externos giratorios, cintas u opciones de almacenamiento de objetos con inmutabilidad, protegidos por encriptación.
- «0»: Asegurar que los respaldos estén verificados sin errores.
La efectividad de cualquier respaldo depende de un proceso riguroso de verificación. Para eso debes monitorear tus copias de seguridad diariamente para detectar y resolver errores rápidamente.
Protegiendo la información en un mundo digital.
En un mundo donde la seguridad de los datos es una prioridad, la Regla 3-2-1-1-0 se presenta como una estrategia fundamental para proteger tu información valiosa.
Por consiguiente, la prevención será la clave, y esta regla proporciona una guía sólida para garantizar la resiliencia ante las amenazas en constante evolución.
(S.M.C)